El ministro de Defensa argentino Julio Martinez dijo que durante los últimos 10 años de gobierno kirchnerista, se perdieron más aviones que en la Guerra de las Malvinas.
La desprogramación de los últimos reactores supersónicos de
la Fuerza Aérea Argentina, que fueron sacados de servicio en noviembre de 2015, en
la VI Brigada Aérea de Tandil, dejó al Arma sin cazas supersónicos ó de superioridad aérea .
"Tenemos que
recuperar la capacidad militar. En la guerra de Malvinas, la Argentina perdió
70 aviones y en los últimos diez años de kirchnerismo, por falta de
mantenimiento e inversión, se perdieron 100", dijo el ministro Martinez.
La última adquisición del material aéreo para la Fuerza
Aérea Argentina, fue realizada en 1995, cuando el gobierno de Menem decidió
pagar u$ 400 millones por la adquisición de 32 monoplazas A-4M y 4 biplazas
OA-4M, todos pertenecientes al US Marine Corps que había sacado de servicio.
La empresa encargada de la modernización completa de las
aeronaves fue Loockeed Martín Skunk Works, de EE.UU.Tras lo cual cambiaron la
denominación MacDonnell Douglas A-4AR Fightinghawk.
Todas esas bajas eran previsibles; no hubo ninguna planificación
en los últimos años", refirió una fuente de F.A.A.. El poco material aéreo
que todavía volaba debió ser sostenido con parte de otros que ya habían quedado
inoperativos, ante falta de repuestos para sostenerlos aptos para el vuelo y el
combate aéreo.
¨La compra de un avión implica no sólo la incorporación de
un nuevo sistema de armas, sino también poner a punto toda la cadena logística
que permite que esas aeronaves puedan volar¨, agregó la fuente aeronáutica
sobre las bajas expectativas sobre la posible adquisición de aeronaves de
entrenamiento avanzado de fabricación italiana o surcoreana.
El personal de la Fuerza Aérea no tiene expectativas sobre la resolución inmediata de
este grave deterioro y ausencia de material de vuelo que se fue incrementando
en el tiempo.
"No existe una línea de continuidad. Los funcionarios
se encuentran con que los anteriores dejaron las aeronaves fuera de servicio y
recién ahora salen a fijarse qué se necesita", aportó un piloto.
La falta de aviones de transporte liviano hace que se deba
movilizar los pocos C-130 Hércules, que existen. Los C-130 son aviones de transporte
de personal con gran capacidad de carga, que son usados para transportar
cargamentos menores, incrementando los costos de la operación.
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