Argentina lanza un nuevo nano satélite al espacio
El nuevo nano
satélite denominado ¨Manolito¨ es de plataforma abierta, y fue puesto en órbita
a las 4.30 desde Rusia
"El proyecto es altamente innovador, no sólo en cuanto
al contenido sino por la manera en que lo hemos implementado", definió
Barañao ministro de Ciencia y Tecnología
en una conferencia, junto a Kargieman, Gerardo Richarte y el gerente de
la División Proyectos Aeroespaciales de la empresa rionegrina Invap, Tulio
Calderón.
Así, el "Manolito", y también su antecesor,
"El Capitán Beto", forman
parte de una plataforma tecnológica financiada en parte por el Ministerio
mediante una inversión de 10 millones de pesos, junto a Invap e inversores
privados.
Kargieman afirmó que el objetivo del proyecto es
"llevarlo a un entorno en el que pequeñas universidades, e inclusive
aficionados, puedan llevar tecnología al espacio, y dejamos la plataforma
abierta para que pueda ser utilizada por otros, sin nuestro involucramiento".
La plataforma consiste en un sistema que sirve como base
para hacer funcionar determinados módulos de hardware o de software con los que
es compatible, y permite desarrollar un linaje de nano satélites educativos
para formar especialistas, así como probar nuevas aplicaciones científicas.
"Vendemos aviónica, partes de satélites y lanzadores, y
uno de los `nichos` (de mercado) son estos satélites educativos que se vuelan
con cargas útiles para probar componentes a bordo, que permita desde Argentina
hacer pequeños satélites para probar cosas", comentó Calderón.
El proyecto, que complementa el Plan Espacial argentino,
está dentro de la tendencia mundial de contar con aparatos integrados que aúnan
sensores remotos, electrónica, hardware, y gente controlando los aparatos y sus
aplicaciones en forma remota.
A partir del acuerdo con Invap para incubar estas ideas en
su laboratorio de Bariloche, "Manolito" implicó 70.000 dólares en
componentes, 130.000 en lanzamiento -que se hará la próxima madrugada desde
Rusia-, más un presupuesto mayor para el desarrollo de ingeniería y la
generación de la plataforma.
La versión tecnológica de su nombre es CubeBug-2, pesa casi
dos kilos, fue desarrollado por unas 18 personas y con materiales de 12
proveedores.
"El objetivo con `El Capitán Beto` fue aprender a hacer
satélites, y tratamos de construir tecnología espacial -como `Manolito`-
tomando más riesgos que los que toma un satélite tradicional, pero podemos
integrarlos más veces con menores costos" para seguir probando
aplicaciones científicas, planteó Richarte.
"Manolito" navega a unos 600 kilómetros de la
Tierra, a la que rodea por el Polo cada hora y media, a la velocidad
vertiginosa de unos 27.000 kilómetros por hora, portando una cámara de 20
megapíxeles para obtener fotografías del Planeta y un GPS desarrollado por
Satellogic.
Está fabricado con más del 80% de componentes nacionales
entre los que se cuentan los paneles solares, desarrollados por la Comisión
Nacional de Energía Atómica, y la computadora de a bordo.
Será monitoreado desde dos estaciones terrestres ubicadas en
la ciudad rionegrina de Bariloche y bonaerense de Tortuguitas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario